¿Cuánto oramos por los que están cerca a nosotros que no conocen a Cristo?
Dios motivó a Su hijo para que viniera a salvar a todo el mundo...Dios se alegra y se goza cuando los corazones aceptan a Jesucristo y se vuelven a El por fe.
Cristo nos reconcilió con el Padre por medio del sacrificio de la cruz, 2Co. 5:18, pero el enemigo se opone a nosotros y a nuestras oraciones, pues su plan es evitar que la mayoría de personas escuchen el evangelio y se rindan a Jesucristo: satanás sabe que perdió la guerra y solo desea hacer el mayor daño posible.
Nosotros podemos hacerle frente en oración y clamando por los perdidos, pidiendo que abra sus ojos y les revele la necesidad de un salvador. enviándonos a nosotros a mostrarles el amor del salvador.
Nuestras oraciones y nuestra obediencia a Jesús, pueden crear la oportunidad de que otros escuchen el evangelio. Lucas 19:10 Jesús vino a buscar lo que se había perdido.
¿Estás lista y dispuesta a evangelizar con tu vida?
DISPOSICÓN
Necesitamos orar para que Dios ponga disposición y confianza en nuestra boca para hablar del misterio del evangelio.
No podemos dejar que la vergüenza y el temor al rechazo eviten que compartamos el mensaje más maravilloso del universo. Oramos para que el Espíritu Santo provoque el arrepentimiento.
¡Dejaré mi comodidad por compartir el mensaje de salvación!
Ora por los perdidos
ora por los misioneros
ora por los líderes y autoridades
ora por los que están en influencia, etc. y una convicción de pecado agite sus corazones y traiga un arrepentimiento y un deseo de limpieza.
Dios sabrá tomar tus oraciones y usarlas y pueda preparar sus corazones para prepararlos para conocer la verdad.
La conciencia de los perdidos está ciega, y no tienen esperanza, pero nosotros podemos ser usados para poder llevarles la luz espiritual para que Dios los rescate.
Romanos 10:13 Todo el que invoque el nombre del Señor, será salvo,
ORACIÓN:
Señor que mi corazón se vuelque a los perdidos,,, no quiero evitarlos o ignorarlos, deseo dolerme con ellos y clamar de corazón por ellos. guárdame de quitarle importancia y aún la necesidad que tienen de conocerte o de considerar que otro tiene que ocuparse de su salvación.
Abre mis ojos cada día, para poder ser un testimonio eficaz, de tu bondad y fidelidad.
Ayúdame a pelear contra el enemigo, para que las personas no mueran sin tu verdad.
Gracias por permitirme ser parte de esta prioridad del reino, ayúdame a considerarlo un privilegio no una carga, un sacrificio voluntario por el sacrificio maravilloso que hiciste por mí Amén.
El Plan de Batalla para la Oración
Stephen y Alex Kendrick
Abrazadas por Su Gracia ©
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